Si hay una comida típica romana para la Semana Santa esa es sin duda la Pizza de Pascua, o más exactamente, Pizza Cresciutta (o Ricresciutta) di Pasqua, muy tradicional en la capital de Italia y en general en toda la región del Lazio.
Antes de continuar, es justo advertirte de que a pesar de su nombre no se trata de un tipo de pizza más sino de una creación culinaria completamente diferente. Tampoco es un plato salado, sino dulce. En estos días se encuentra en todos los supermercados y son muchas las casas de Roma donde se cocina al modo tradicional.
La costumbre es comerla por la mañana del día de Pascua, acompañada de huevos duros, chocolate caliente y coralino, el salami romano típico de la Semana Santa. Una mezcla curiosa, desde luego.
La receta tradicional de la Pizza di Pasqua es esta:
- Se mezclan 500 gramos de masa de pan ya fermentada con 300 gramos de azúcar, 100 gramos de mantequilla ablandada, 5 yemas de huevos, y un poco de sal.
- Se deja reposar la masa durante medio díaa, para volver a amasarla otra vez y añadir las claras batidas de los huevos.
- Luego se mezclan los ingredientes y se deja reposar de nuevo.
- Después se enrolla la masa y se cortar en pequeñas rebanadas.
- Finalmente se introducen en una cuenco untado con un poco de mantequilla y se le da una hora de horno.
Hay quien añade un poco de licor a la mezcla, pero la receta original no contempla esta posibilidad. Al fin y al cabo, se trata de una receta rural pobre elaborada con los ingredientes de casa y los del resultado del trabajo de la tierra. Suave por dentro y oscura por fuera, su sabor es muy particular.