La Iglesia de Santa María de la Concepción de los Capuchinos (Santa Maria della Concezione dei Cappuccini) es una de las más peculiares de Roma. Pero no es a su fachada barroca ni a su ubicación en plena Via Veneto a las que debe su fama, sino al inusual contenido de su cripta.
Y es que en esta cripta se encuentran los restos mortales de más de 4.000 monjes capuchinos que fueron enterrados aquí a lo largo de la historia. Por si esto no fuera ya lo suficientemente macabro, sus muros han sido decorados con los huesos de estos monjes formando dibujos y composiciones.
La razón de que haya tantos huesos en este lugar es que muchos de ellos fueron traídos desde el cementerio romano de Via Lucchesi durante años desde la construcción de la iglesia hasta el siglo XVIII.
Tibias, costillas y cráneos decoran las paredes en un espectáculo sobrecogedor y para muchos desagradable. Una decoración que, en cambio, supone un poderoso imán para miles de visitantes cada año. Lo cierto es que si no fuera por esta curiosa cripta, seguramente esta pequeña y modesta iglesia ni siquiera aparecería en las guías de la ciudad.
Pero no todos los huesos de los capuchinos se encuentran decorando las paredes, también se conservan algunos esqueletos ataviados con el hábito monacal, convertidos en tétricos guardianes de la cripta. Podríamos decir que es una visita en Roma recomendada única y exclusivamente a los muy curiosos y a los amantes de lo siniestro.
Plano de ubicación
Horario
Diariamente de 9:00 a 12:00 h. y de 15:00 a 18:00. - Cerrado lunes y martes
Precio
Donativo obligatorio de 1€
Direccion
Calle Vittorio Véneto, 27.
Como llegar
En Metro: Estación Barberini, línea A. En Autobús: líneas 52, 53, 61, 62, 63, 80, 95, 116, 119 y 175