El alarmante deterioro de la emblemática Fontana de Trevi de Roma, uno de los monumentos más visitados de la ciudad, preocupaban a los arqueólogos y los responsables del patrimonio histórico italiano, sobre todo porque ni el Estado ni el ayuntamiento parecían dispuestos a afrontar el gasto.
Por suerte, no hará falta precintar el lugar donde los turistas acuden para lanzar sus monedas cumpliendo con el rito, ya que va a ser restaurada gracias al mecenazgo de la firma de moda italiana Fendi.
Las tareas de restauración de la fuente donde se bañaron Marcello Mastroianni y Anita Ekberg en aquella inolvidable escena de La Dolce Vita, están valoradas en nada menos que 2,5 millones de euros. Fendi aprovechará para anunciarlo en el Ayuntamiento durante la Semana de la Moda que se celebrará e nla capital italiana. Una forma eficaz de publicidad, aunque por una buena causa.
La masiva afluencia de turistas y los temporales de nieve que azotaron Roma el año pasado castigaron con dureza a esta fuente, la obra maestra de Nicola Salvi creada en 1735, poniendo en peligro a al estructura entera. Y acontamos aquí cómo durante el verano pasado se desprendieron varios trozos del lateral izquierdo de la fuente.
Fendi no es la primera firma italiana de la moda que dedica fondos a este tipo de obras. Recordemos que la casa de zapatos de lujo Tod’s destinó 25 millones de euros para la restauración del Coliseo a cambio de los derechos de uso comercial de la imagen del monumento durante 15 años, mientras que Valentino fue mecenas de otro importante monumento de la Ciudad Eterna, el Templo de Venus.