Aunque la ciudad de Roma es algo parecido a un gigantesco museo a cielo abierto, no hay que desaprovechar nuestra visita y dejar de visitar sus famosos y prestigiosos museos. Uno de los menos conocidos y sin embargo muy interesante es el Museo de Arte Contemporáneo de Roma, más conocido por el nombre de MACRo.
Este espacio, el heredero de la antigua Galleria Comunale d’Arte Moderna e Contemporánea (Galería municipal de Arte moderna y contemporánea de Roma), fundada en 1925, es en la actualidad un museo municipal que en los últimos años se ha convertido en uno de los más importantes centros de actividades artísticas y culturales de la capital italiana.
El proyecto fue bautizado como MACRo y fue abierto al público a finales de la década de los noventa. El gran objetivo era dotar a la Ciudad Eterna de un museo enteramente dedicado al arte contemporáneo y de paso dotar de un espacio cultural y turístico al distrito Nomentano del Municipio III, al noreste de la ciudad.
La sede principal del MACRo se halla en un antiguo edificio industrial de principios del siglo XX que originalmente perteneció a la cervecería Peroni. Su estructura fue totalmente remodelada gracias a la mano experta del arquitecto francés Odile Decq, el creador de un elegante y vanguardista espacio de acero y cristal dotado de seis salas de exhibición de mil seiscientos metros cuadrados que además incluyen una mediática, la biblioteca, una sala de conferencias, una librería y el salón bar.
Aquí está el verdadero epicentro de las vanguardias artísticas italianas y el depósito de las grandes obras de la mayor parte de artistas italianos desde la post-guerra hasta nuestros días.