Al hablar de los tesoros de Roma nos perdemos siempre en los lugares comunes, los grandes monumentos y sus magníficas obras de arte, olvidando que aquí se encuentran también algunos de los más hermosos parques urbanos de Italia, extensos, elegantes y románticos: la Roma verde. Descúbrela con nosotros.
El primero al que tenemos que hacer referencia es, claro está, Villa Borghese, al que se accede fa?cilmente desde las famosas escalinatas de la Plaza de España. No es el más grande pero sí es el ma?s ce?ntrico. Allí encontramos el Parco de Siena, donde en otros tiempos se usaba para carreras de caballos, la terraza de la Casina del Lago, también el Giardino del Lago rodeado de flores orientales, y museos como la Galeri?a Borghese o el Museo Nacional de Arte Moderno.
Villa Pamphili es, aunque menos célebre que el anterior, el parque más grande de Roma. Uno de sus rincones más concurridos es el romántico Casino del Bel Respiro, dominado por una estatua de Cupido (parada obligatoria para quien va a Roma en viaje de novios). Tiene un aspecto en cierto modo salvaje, con prados y bosques de encinas y alcornoques.
El tercer gran parque romano es el de Villa Ada, el favorito de los romanos ma?s jo?venes y alternativos. Aquí se celebra el festival de mu?sica Roma Incontra il Mondo, uno de los grandes eventos culturales del verano en la Ciudad Eterna.
Entre el resto de parques romanos cabe destacar el Giardino degli Aranci (El jardi?n de los naranjos), recogido y romántico; el escenario verde del Monte Celio, sede nocturna del prestigioso Festival de Jazz de la ciudad, los Jardines del Gianicolo el mejor mirador de Roma, o el Monte Mario, que es también la colina más alta de la ciudad de las siete colinas. Todos ellos merecen una visita y un paseo.
